La industrialización del gas permite añadir valor agregado para incrementar los ingresos que se recibe por la venta del gas natural. “Gracias a la decisión del Presidente Evo Morales de nacionalizar los hidrocarburos y al fuerte compromiso de técnicos y profesionales, hoy podemos ver materializado el anhelado sueño de industrializar el gas”, subrayó el presidente de YPFB, Óscar Barriga Arteaga.

El pedido del pueblo boliviano de ingresar a la era de la industrialización del gas se hizo realidad cuando el presidente Evo Morales Ayma instruyó en septiembre de 2017 el inicio de operaciones de la Planta de Amoniaco y Urea. El gas natural es procesado primeramente con vapor de agua para producir gas de síntesis, luego se introduce aire para obtener el nitrógeno molecular, este reaccionara con el hidrógeno del gas de síntesis para producir el amoniaco.
En la planta de urea se hace reaccionar el amoniaco con el dióxido de carbono (el dióxido de carbono es obtenido en la sección de endulzamiento ubicada en la Planta de Amoniaco) para obtener la urea. La planta tiene una capacidad de producción de 2.100 toneladas métricas por día de urea granulada.
Histórica inversión
En el primer proyecto petroquímico de Bolivia, la estatal petrolera invirtió alrededor de $us 958 millones que comprende la construcción de la planta, fiscalización y obras complementarias del complejo.
Tendencia creciente de la venta de urea
Actualmente, Bolivia se consolidó como exportador de urea y trabaja en la perspectiva de diversificar su cartera de clientes. La estatal petrolera comercializa y distribuye urea granulada de la marca Urea YPFB al por mayor a los diferentes puntos de ventas, y/o consumidores finales.
La urea es el fertilizante nitrogenado más reconocido y de mayor importancia a nivel mundial. Cerca del 80 a 85% de la producción de urea es utilizada como fertilizante y más del 40% de los alimentos cultivados hoy en día en el mundo, son fertilizados con la urea.
Con el consumo de 80% de la urea comercializada, Santa Cruz es el principal mercado del Complejo de Bulo Bulo, esto debido a la vocación agrícola de este departamento. Cochabamba, Tarija y La Paz son consumidores que también aumentan paulatinamente su demanda.
Complejo petroquímico, mayores divisas para el país
Asimismo, YPFB encara el proyecto de la Planta de Propileno y Polipropileno que permitirá generar ingresos de mayores divisas para el país. El complejo que se construirá en la provincia Gran Chaco del departamento de Tarija, permitirá industrializar el gas natural vía transformación química del propano contenido en el GLP y abastecerá el mercado interno de polipropileno.
Bolivia ingresará a la era de los plásticos, con la producción de pellets de polipropileno, materia prima para la fabricación de diversos productos. El polipropileno es un plástico empleado en envases como botellas, empaques, envolturas de medicamentos, cosméticos, juguetes, material médico, material de escritorio, bolsas, fibras, fibras trenzadas para sogas y muebles plásticos.
La inversión comprometida para este proyecto es de $us 2.200 millones, cuyo inicio de ejecución se realizará mediante la licitación pública internacional en el segundo semestre de este año para contratar a una empresa especializada en la industria petroquímica.
La industria petroquímica tiene un efecto multiplicador en la economía, porque desencadena el desarrollo de otras actividades industriales en cada una de las cadenas de valor de los productos involucrados.
Adicionalmente, se visualizaron proyectos que profundizarán el proceso industrializador en el país. En la cartera de proyectos de YPFB se considera la ejecución de la Planta de Ácido Nítrico, Planta de Nitrato de Amonio, Planta de Urea-Nitrato de Amonio-(UAN), Planta de MAP/ DAP/NPK, Planta de Amoniaco, Planta GTL (Diesel Oil Ecológico) y Planta Urea Formaldehido.